Amelia, aquella muchachita sencilla que demostraba humildad a pesar de la belleza del rostro con la que nació, era admirada de todos, en las diferentes manifestaciones de su comportamiento. Su moral y su ética prevalecían, era una mujer codiciable.
Las responsabilidades para con sus padres y el ejemplo que vio en quienes le dieron la vida, las llevó consigo toda su existencia y se convirtió en un ser maduro para afrontar lo que depara aquel destino trágico en la historia escrita de antemano, para únicamente transitar en ella todos los seres humanos, pero, ese trayecto de la vida, ¡no lo conocemos!
Amelia, pasó por todas aquellas pruebas terribles que muchos no las toleramos y que nos hace arrepentir hasta de haber nacido. Sufrimientos intentos pero el amor genuino hacia su esposo e hijos la mantenía viva siguiendo los trazos del mapa de su vida hasta llegar al fin y cumplir con lo que ya estaba determinado.
Esta es una historia inspirada en la vida real, una historia profunda y llena de sentimientos muy profundos y dolorosos que definitivamente llegarán al corazón de quien la lea.